Para muchas personas es muy difícil escribir un
texto de una o dos páginas, incluso es difícil escribir un párrafo, al
empezar a escribir se nos olvida muchas veces que tenemos que tener una
continuidad en el espacio y una coherencia a lo que escribimos. Muchos de los
errores que tenemos es que no sabemos cómo explicarnos, por ende hace que la
persona que está leyendo nuestro texto no entienda o se le dificulte leerlo.
Hay muchas facilidades que nos puede servir para no cometer esos errores.
Primero tenemos que escribir todo lo que sepamos de
ese tema, una de las formas en la cual podemos escribir es creando una lluvia
de ideas, en la cual ponemos todo lo que sepamos de ese tema, es importante no
poner frases completas sino palabras que nos ayude a recordar lo que queremos
decir, no importa si lo que se escribe es muy obvio, es necesario escribir todo
lo que podamos de ese tema, porque ayudara a ordenar mejor las ideas.
Después de acabar con la lluvia de ideas, podemos
empezar a explorar el tema, es decir, buscar información sobre lo que vamos a
escribir; una guía que nos ayudara a poner en práctica la exploración del tema
es “el cubo”. Esta guía nos ayuda porque estudiaremos los posibles hechos que
se presenten en el tema, en cada cara del cubo pondremos un hecho, los cuales
son: describirlo, compararlo, relacionarlo, analizarlo, aplicarlo y
argumentarlo.
Al describir el tema podremos entender mejor sobre
que vamos a escribir y eso nos ayudara a tener una mayor fluidez. Cuando lo
comparamos, podemos tener un mayor conocimiento del tema y esto hará que
podamos tener más argumentos a la hora de apoyar el texto, es igual que
relacionarlo porque tendremos un mayor campo para explicar el tema. Analizar el
texto, es mirar, cuáles son sus puntos a favor y sus puntos en contra, después
miramos para que funciona el tema. Por ultimo buscamos argumentos, los cuales
nos ayudara a tener un mayor peso en nuestra tesis y a explicar mejor lo que
pensamos sobre ese tema. Posteriormente, buscaremos las palabras claves de cada
argumento, las separaremos y encontraremos nuevas ideas que nos ayude a ampliar
la tesis del argumento, además de poder tener una mejor explicación a lo que
escribimos.
Asimismo tenemos que buscar la forma de unir esas
frases, por lo que es muy importante usar conectores, pues nos ayuda a
entrelazar las frases entre si y crear la idea que queremos mostrar; igualmente
debemos usar los signos de puntuación; son una herramienta de ayuda donde
el lector puede tener un orden de ideas y no se dificulte al
entender una frase, pues muchas veces escribimos frases muy largas lo que
dificulta que el lector pueda retener toda la información que queremos decir.
Después de haber usado conectores y signos de
puntuación, podemos empezar a crear párrafos llanos, que tratan de buscar una
mejor comprensión para el lector, es decir, buscan sintetizar, facilitar,
mostrar las tesis de los párrafos más fácilmente, y al final el lector podrá
conservar más fácilmente el enfoque del texto. Tenemos que considerar que
muchas veces al escribir creamos párrafos muy largos, donde solo hay una
mayúscula y un punto; al inicio y final del párrafo respectivamente. Los
párrafos largos crean una molestia al lector y hace que la tesis del argumento
se pierda, pues embutimos tanto conocimiento que el lector no podrá retener
todo lo explicado.
Los buenos párrafos son de 6 ó 7 renglones (no es
una regla inviolable el que tenga esos renglones, es una sugerencia para saber
el tamaño de un párrafo); el párrafo tiene que tener una tesis con sus
correspondientes argumentos. Muchas veces tenemos muchos argumentos para
respaldar la tesis, por tal motivo podemos crear párrafos que sustenten el
principal, donde tiene que ir la tesis, asimismo se pueden unir a través de los
conectores.
Terminado de hacer todo esto, podremos tener un
mejor texto, donde ayudaremos al lector, y al mismo tiempo podremos tener una
mayor fluidez para escribir textos más adelante.